lunes, diciembre 10

Una diferente forma de crecer



Cuando le toco, siento su calor y una sensación reconfortante me recorre el cuerpo.
Cuando me mira de esa manera, río... y él ríe conmigo.
Cuando sé que está mal, lloro y no consigo entender por qué no puedo parar.
Cuando se enfada, en realidad solo me está demostrando lo que le importo.
Cuando me abraza y me susurra un débil "te quiero" sé que está dejando escapar un trocito de su corazón.

Muchas veces pienso que dependo en bastantes aspectos de él... algo triste, yo que siempre he querido ser libro e independiente. Pero pensándolo mejor... puede que lo quiera tanto que quizás me sienta una parte más de él, soy esa parte que cuando él sufre entristece , esa mínima parte que cuando él se siente bien... crece.